Explora las mañanas brumosas de Monteverde con Ocotea Tours & Transfers, cuando el bosque nuboso despierta lleno de vida y el perfume de la tierra mojada se mezcla con el susurro de los árboles. En este entorno mágico, rodeado de musgos, bromelias y cantos de aves, es posible toparse con creaciones que respiran la misma energía del bosque.
Muy cerca de Santa Elena, en un taller acogedor, la arcilla se transforma bajo manos expertas: tazas con símbolos de transformación, silbatos que suenan con el agua y cuencos con esmaltes inspirados en los tonos de las montañas y los ríos de Monteverde. Desde este rincón del bosque nuboso, Ana Ovares, fundadora de ArteSana, da vida a una cerámica profundamente conectada con la naturaleza que la rodea.
Descubre el arte de Ana en su propio espacio: visita su estudio, observa cómo nace cada pieza y participa en talleres que entrelazan el trabajo artesanal con la magia del bosque nuboso.
“Monteverde es, para mí, un altar viviente”, expresa Ana. “Cada día, el bosque nuboso me abraza con su bruma, con el canto de sus aves y su silencio sagrado. Aquí, respiro al ritmo de la Tierra. La naturaleza no está para ser solo mirada, sino para ser honrada y atendida”.
Cada pieza que crea nace de una conexión profunda con el lugar que la vio crecer. En Monteverde, Ana ha vivido una vida entretejida por el arte y la sanación. Con el tiempo, ha perfeccionado su técnica en cerámica, pintura y arte intuitivo, al mismo tiempo que se ha formado en terapias holísticas, herbolaria y guía espiritual. En su universo creativo, el arte y el bienestar caminan juntos.
A través de Ocotea Tours & Transfers, no vienes solo a conocer Monteverde; aquí eres recibido con el espíritu creativo del pueblo, de la mano de quienes han hecho del bosque su hogar.
Ana describe su proceso cerámico como un ritual de conexión:
“Recojo arcilla de la tierra de Monteverde y la transformo en un material maleable, lleno de memoria y medicina. Cada pieza se trabaja con lentitud, a mano o en el torno, siempre con intención y con una escucha interior. El secado sigue los ciclos de la luna, y el fuego del horno despierta la verdadera esencia de la obra”.
Incorpora pigmentos naturales y óxidos, muchos de ellos obtenidos localmente, para evocar las texturas y los colores del bosque, los ríos y las montañas. El resultado es una colección de objetos que llevan consigo el espíritu de Monteverde: cada taza, silbato o cuenco es un pequeño recuerdo de tu visita al bosque nuboso.
De nuestro hogar al tuyo, llévate un pedacito de Monteverde contigo.
En el arte de Ana, la naturaleza es el núcleo: serpientes que se deslizan sobre tazas como símbolo de transformación, ojos que invitan a mirar hacia adentro, flores y raíces que evocan los ciclos de la vida y el renacer. Su obra revela la luna, el agua en movimiento y la solidez de la tierra. “Cada pieza es un puente entre el espíritu humano y el de la naturaleza”, dice Ana. “Nos recuerda que formamos parte del mismo tejido sagrado”.
Sus silbatos de agua encarnan esta filosofía con belleza: al llenarse, emiten un sonido que recuerda al canto de los pájaros o al murmullo de los riachuelos que enamoran en Monteverde. Son una experiencia lúdica y meditativa a la vez, y evocan el recuerdo de tu tiempo en este lugar. “No son solo instrumentos”, afirma Ana, “son instrumentos del alma, para el ritual, la meditación o simplemente para llenar un hogar de sonido vivo”.
Ana reconoce que es Monteverde mismo quien da fuerza a nuestra comunidad creativa.
“La montaña atrae a las almas sensibles”, comparte. “La energía del bosque nuboso despierta una creatividad auténtica: la niebla que danza, los cantos de las aves, las semillas que brotan. Quienes llegan aquí lo hacen para vivir con intención, y dan forma a su espíritu por medio de la música, la pintura, la cerámica o las historias. Nos reconocemos como parte de una misma comunidad, compartiendo talentos y cuidándonos, como árboles cuyas raíces se entrelazan bajo el suelo, aunque no podamos verlas”.
La colaboración y el profundo respeto por la naturaleza hacen de Monteverde un lugar único para el arte, y ofrecen a nuestros viajeros una experiencia cultural rica y auténtica para vivir con Ocotea Tours & Transfers.
Como todo arte verdadero, la obra de Ana, en su esencia, habla de algo más que la belleza.
“Espero que, cuando alguien se lleve una pieza a casa, sienta que está llevando consigo un guardián de la intención y la memoria”, dice. “Que le recuerde honrar a la madre tierra, escuchar su intuición y vivir en conexión con los ciclos sagrados de la vida. Cada creación refleja el alma e invita a la transformación, la sanación y el despertar”.
Para quienes nos visitan, estas creaciones no son simples recuerdos, sino expresiones palpables del ecosistema, la identidad cultural y la visión de vida de Monteverde. Un puente hacia una conexión más íntima con este lugar y con su gente.
Te invitamos a vivir el alma creativa de Monteverde a través del trabajo de Ana.
Nuestro concierge puede ayudarte a coordinar una visita privada a su estudio o un taller personalizado, donde podrás conocerla en persona, presenciar su proceso creativo y dar forma a tu propia pieza de cerámica con su acompañamiento. Para quienes buscan experiencias auténticas y con sentido, esta es una oportunidad única de conectar con la cultura, la comunidad y el compromiso ambiental de Monteverde.
Cada pieza de ArteSana narra una historia: del bosque, de la intención y del cambio. Y si tienes la fortuna de vivir la experiencia, te irás con una memoria viva del bosque nuboso entre las manos.
Ana nos recuerda: “Formamos parte de la naturaleza, y es en ella donde hallamos el camino de vuelta a nuestro ser”.
Acompáñanos y llévate a casa no solo una pieza artesanal, sino un recordatorio del altar vivo de Monteverde, donde el arte, la comunidad y la naturaleza se encuentran. Cada cerámica guarda un instante de creación consciente, una conexión con los ciclos sagrados del bosque y los valores que inspiran el trabajo de Ana, los mismos que guían cada experiencia que diseñamos en Ocotea Tours & Transfers.